Con los niños a cuesstas

Con los niños a cuesstas

viernes, 21 de diciembre de 2012

Les Agudes - Turó de l'Home

Esta semana hemos ascendido las dos cimas más altas del Montseny, el Turó de l'Home y Les Agudes. Se trata de una excursión algo larga y con un desnivel de más de 500 metros, por lo que la recomiendo para niños mayores de 6 años, o bien si son más pequeños, que estén bastante acostumbrados a caminar por la montaña. De todas formas, podemos sólo subir a una de las dos, siendo entonces apta para todos. Es una ruta circular que se inicia y acaba en la Font de Passavets, pasado un kilómetro de Santa Fe del Montseny, aunque la subida a Les Agudes se realiza desde el Pla de l'Espinal, unos cientos de metros carretera arriba. Para Erik y Jan ha sido muy especial, pues ya tienen en su zurrón las tres cimas más altas del Montseny, con la repetición del Turó de l'Home, y para Jan en concreto, una pequeña proeza si tenemos en cuenta que sólo tiene cinco años.

Distancia: 10 km.
Tiempo: 5 h 30', con paradas
Tiempo para un adulto: unas 3 h. 30', sin paradas

Mapa de la ruta - Ed. Alpina

Dejamos el coche en el aparcamiento de la Font de Passavets y salimos a la carretera para subir por ella unos 300 metros hasta alcanzar la casa conocida como El Convent, que veremos a nuestra derecha. Pasada la casa, tan sólo unos metros más arriba, tomamos el sendero a nuestra izquierda y comenzamos a seguir las marcas rojas pintadas en los árboles y que, junto con algunos postes, nos guiarán hasta la cima de Les Agudes. Si decidimos acortar la excursión y sólo subir a esta montaña, se puede dejar el coche en una pequeña explanada que hay justo antes de llegar a El Convent.

Subimos por la carretera

El Convent

Seguiremos las marcas rojas

Iniciamos el camino por un precioso hayedo con el sendero totalmente tapado por las hojas. En algunos puntos es tal la cantidad de hojas que me llegan a la rodilla y tengo que ir abriendo huella como si de una ladera nevada se tratara. En esta zona agradecemos las marcas rojas de los árboles, pues al no ver el camino podríamos desviarnos fácilmente de la ruta.

Cruzando el hayedo

Las hojas nos llegan hasta las rodillas

Seguiremos las marcas rojas en todo momento


Conforme vamos subiendo diversas pistas se cruzan en el camino, todas ellas señalizadas con postes que nos marcan el camino a seguir. Allá donde se acumulan más hojas nos cuesta más avanzar, aunque para los niños es una auténtica aventura.

En cada cruce encontramos un poste

Erik tomando notas en su cuaderno de rutas

Las hojas nos llegan aquí a la cintura

Seguimos ascendiendo por el hayedo

Vamos cruzando pistas continuamente hasta hacer un pequeño giro hacia el suroeste para dirigirnos hacia la Font de Briançó. A nuestra izquierda divisamos la cima del Turó de l'Home, segundo objetivo del día. Nos lo vamos tomando con calma, pues los niños no paran de jugar en la zonas donde se acumulan las hojas y no hay manera de que avancen.

Nos encaminamos hacia la Font de Briançó

Nuevamente abriendo huella entre las hojas

Erik enterrado en la hojarasca

Desde el camino divisamos la cumbre del Turó de l'Home

El camino mejora antes del llegar a la fuente


Llegamos por fin a la Font de Briançó, de la que mana un chorrito de agua fresca. Un poste informa que es agua "sin garantía sanitaria", pero yo la cambiaría sin pensar por la que me sale del grifo en casa. Descansamos un rato para recuperar fuerzas y atacar los últimos repechones que nos faltan hasta la cima. Pasada la fuente, el camino se bifurca en dos senderos señalizados. El que sigue recto nos llevaría hasta el Turó de l'Home; el de la derecha, que traza una diagonal en la montaña, es es que nos conducirá hasta la cima de Les Agudes.

Font de Briançó

Un cola cao para recuperar fuerzas

Cogemos el sendero de la derecha

Rodeados de hojas en el primer tramo de la subida

Iniciamos el ascenso, continuo pero no muy duro, por el hayedo con las hojas que nos vuelven a llegar casi a las rodillas. Poco a poco la vegetación cambia algo y el terrero se hace más cómodo hasta llegar al Coll de Les Agudes. Ahora sólo queda subir por un terreno muy pedregoso hasta alcanzar la cima, coronada por una cruz metálica, a mi modo de ver, un poco chapucera.

El camino mejora sin tantas hojas

Jan alcanzando el Coll de Les Agudes

Ya tenemos la cima a tocar

Erik y Jan los primeros en atacar la cima

Subimos con cuidado, porque el terreno es bastante abrupto, mientras Mª José nos sigue a cierta distancia, quizás algo perjudicada por el "mal de altura". Hay que tener cierta prudencia con los niños, si son muy pequeños, para que no tropiecen con algunos de los bloques de piedra que hay en la cima y no perderlos de vista, pues se trata de una cima bastante accidentada y algo aérea.

Mª José cierra el grupo subiendo a su paso

Los niños coronando la cima...

....y Mª José también

Les Agudes, 1706 m.

En la cima, además de la cruz  metálica donde se han colocado varios belenes, hay un reloj solar con forma de libro. Las vistas son espléndidas en un día muy claro: los Pirineos, con poca nieve por cierto, los riscales de Tavertet y el Far, la sierra del Cadí, el mar, etc. Poco a poco van llegando excursionistas hasta congregarse un buen número de ellos. Al menos hemos disfrutado de la cima para nosotros solos durante unos minutos. Según el mapa de Alpina, la altura de Les Agudes y el Turó de l'Home es la misma, 1706 metros. Sin embargo, según el ICC el segundo supera al primero por escasos 40 cm, 1705,8 a 1705,4. Después de un buen rato en la cumbre, empezamos a descender nuevamente hasta el collado, donde los niños quieren jugar con un poco de nieve que queda de la nevada de hace unas semanas.

Jan y Erik junto al reloj solar

Vistas al Turó de Morou y el pantano de Santa Fe

La cima comienza a llenarse de excursionistas

La familia disfrutando de las vistas

Erik inicia el descenso

De nuevo en el collado, a los niños les falta tiempo para lanzarse sobre el pegote de nieve (mejor dicho, de hielo) e intentar escalabrarse el uno al otro lanzándose bolas. Intervengo antes de tener que llamar a emergencias, que por cierto ahora cobran el rescate, y nos ponemos nuevamente en marcha hacia el Turó de l'Home siguiendo el cordal que hay entre éste y Les Agudes. Bordeamos el Puig Sacarbassa, que nos apuntamos para subir en una próxima ocasión, y vamos siguiendo el sendero GR 5.2 que en ocasiones se pierde y, aunque vas siguiendo el cordal, te hace caminar por donde consideras más oportuno.

La madre probando la dureza de la nieve

Bordeamos el Puig Sacarbassa dejando atrás Les Agudes

Alcanzamos un nuevo collado

El Turó de l'Home queda algo lejos todavía


El camino es más largo de lo que parece. Pasamos el Turó de l'Home Mort y otro collado, cruzándonos con otros excursionistas que se dirigen hacia Les Agudes. En cada lugar donde encontramos algo de nieve, los niños se paran para jugar con ella, ralentizando la marcha, pero, en fin, se trata de disfrutar de la montaña, no sólo de hacer ejercicio. Alcanzamos por fin el Coll Sesbasses donde seguimos la pista y bordeamos el Turó de l'Home hasta el Coll Pregon, desde donde ascenderemos hasta su cima.

Erik tocando la guitarra con un trozo de hielo

Bajando desde el collado

Llegamos al Coll Sesbasses

La familia con Les Agudes al fondo

Llegamos al Coll Pregon y subimos poco a poco el amplio camino que conduce hasta la cima que está unos metros por encima de la estación meteorológica. En esta ocasión si podemos disfrutar de las vistas, y no como la vez anterior que subimos con los chicos y que una espesa niebla nos lo impidió.

Subida hasta la cima del Turó de l'Home

La familia alcanzando la cima

Turó de l'Home, 1706 m.

Erik tomando más notas en su libreta

No pasamos mucho rato en la cima, pues se ha levantado algo de viento y es bastante molesto. Descendemos nuevamente hasta el Coll Pregon y allí tomamos el sendero señalizado que nos conducirá hasta la Font de Passavets (o Santa Fe como indica el poste) por l'Avetada. Bajamos por el sendero hasta alcanzar un pequeño prado donde hay un promontorio conocido como Rocs Cremats y desde donde se tiene una muy buena visión de l'Avetada, que destaca sobre el gris del hayedo.

Erik divisando los Rocs Cremats

Bajamos por un sendero bastante empinado...

...pasando al lado de algunos abetos...

...hasta llegar a los Rocs Cremats

Continuamos por la pista en descenso, unas veces más empinado que otras, pasando junto al pozo de nieve conocido como Pou del Comte. Llegamos a una zona donde abundan los abetos y a partir de aquí vamos siguiendo el camino que hace continuas lazadas hasta alcanzar la Font de Passavets.

El camino desciende atravesando el hayedo

Pozo de nieve conocido como Pou del Comte

Pasando junto a unos enormes abetos

La riera de Santa Fe cubierta de hojas

Font de Passavets

Por fin alcanzamos el coche tras cinco horas y media de excursión. La duración incluye las muchas paradas realizadas, por lo que se puede reducir bastante. Siendo larga, considero que un adulto puede realizarla en unas tres horas y media. A partir de ahí, tendremos que calcular el ritmo de los niños y las paradas y descansos que hagamos. Como dije al principio, podemos optar por subir sólo una de las dos cimas. Si elegimos Les Agudes, recomiendo hacerlo desde el Pla de l'Espinal, mucho más sencilla que la ruta que sale desde Sant Marçal.