Con los niños a cuesstas

Con los niños a cuesstas

lunes, 18 de enero de 2016

Puig Cornador

Fácil excursión para ascender al Puig Cornador, una elevación del Lluçanés enclavada en la zona conocida como el altiplano central catalán. El punto de partida es la población de Alpens, a donde llegaremos por la C-17, abandonándola en la salida de Santa María de Besora y, sin necesidad de entrar en esta localidad, tomaremos la BP-4653 que nos conducirá hasta la entrada del pueblo. Dejamos el coche en el aparcamiento que hay a la derecha, casi a la salida del pueblo, donde  hay unas figuras de hierro forjado imitando una orquesta.

Mapa de la ruta - ICC


Distancia: 9 km.
Tiempo: 3 horas 15 minutos, con paradas


Nos ponemos en marcha subiendo por la pista asfaltada señalizada con las marcas blancas y rojas del GR-1 y giramos hacia la izquierda. En un par de minutos llegamos hasta el oratorio de Sant Antoni de Pàdua. Avanzamos por el camino unos metros  más y, a la altura de la masía Montjuic, tomamos un senderito a la derecha, siguiendo las marcas del GR (no las abandonaremos hasta casi llegar a la cima). 


Figuras de hierro forjado

Subimos por la pista siguiendo las marcas del GR

Llegamos al oratorio de Sant Antoni

Masia de Montjuic

Nos desviamos por este senderito


El senderito, estrecho pero bien marcado, se desvía hacia la derecha y, tras una ligera subida, desemboca en una pista de tierra que pasa por la masía de Can Torrats. La pista, amplia y cómoda, asciende de forma muy ligera pero continua. Pasamos junto a la Roca de Pena, una curiosa formación rocosa que el viento y el paso de tiempo han modelado para darle la forma de los dedos de una mano.


El sendero sigue unos metros paralelo a la carretera

Una pequeña subida

Vamos a parar a una nueva pista

Can Torrats

Subimos por la pista

Roca de Pena

Da la sensación de estar observando una mano

Pasando junto a la curiosa roca

Seguimos avanzando por la pista hasta que las marcas del GR nos obligan a abandonarla y continuar por un sendero que sale a nuestra izquierda. El camino, ahora señalizado también por marcas amarillas, entra en una zona más sombría y húmeda. Finalmente, volvemos a salir a una pista, donde hay un poste indicador. A la derecha, la pista conduce hasta las ruinas de la masía de Puig-Empi. Nosotros giramos a la izquierda, y volvemos a abandonar la pista unos 40 metros más adelante, tomando un sendero señalizado a nuestra derecha.


La pista sigue su ascenso

En este punto la abandonamos y continuamos por el sendero

En esta parte encontraremos marca amarillas

La vegetación es más abundante en esta zona

Llegando a la pista que conduce a Puig-Empí

Volvemos a abandonar la pista

El camino asciende ahora por una zona más soleada donde legiones de procesionarias salpican el suelo. Si tenemos en cuenta que estamos a primeros de enero y estas orugas suele aparecer al final del invierno, principios de primavera, no hay que ser un lince para darse cuenta que algo va mal y que quizás lo del cambio climático sea algo más que el mantra de un ecologista. Una pequeña subida nos lleva hasta la base del Puig Cornador, que rodeamos por su derecha para llegar al Coll Tallat.


Procesionarias

Otra fila más

Pasando por una zona más despejada

La subida no requiere mucho esfuerzo

Coll Tallat


Un poste indicador en el collado, nos señala diversos caminos. Por la derecha nos llevaría hasta la ermita de Santa María de Vinyoles, por la izquierda bajaríamos hacia Les Lloses. Abandonamos el GR en este punto y giramos hacia la izquierda, tras las marcas blancas y amarillas del PR que se internan en el bosque por un estrecho sendero, que en una fuerte subida nos lleva hasta la cima del Puig Cornador.


El sendero se interna en el bosque

La subida es bastante fuerte

La madre se queda rezagada...

...mientras Jan nos saluda desde la cima

Jan disfrutando de las vistas


Coronamos un nuevo "cent cims", ya son 57 y esperamos sumar más este año. Las vistas son extraordinarias desde la cumbre: al sur, la Plana de Vic y el Montseny; al norte, los Pirineos Orientales, donde observo al Puigmal con menos nieve que pelos tengo en la cabeza. Jodido cambio climático. 


Erik llega junto a su hermano

El Montseny se perfila en el horizonte

Puig Cornador, 1228 m.

Alpens

Poca nieve en el Pirineo


La vuelta la hacemos por el mismo camino, sin visitar la ermita de Santa María. Está cerrada y tampoco tenía ganas de sumar tres kilómetros más a la excursión. Si se quiere realizar una ruta circular que incluya la visita a la ermita, os dejo este enlace donde podréis encontrar una bonita propuesta.